La bebida no sólo perjudica al medio ambiente y nos perjudica así de manera indirecta, sino que también nos hace daño de manera directa porque facilita el desarrollo de problemas de salud como la obesidad, la diabetes o problemas dentales.
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El gasto de esta empresa es desproporcionado sobre todo en agua, pues en 2004 utilizó 283.000 millones de litros de agua y esta cantidad coincide con la que daría de beber a todo el mundo durante diez años. O, lo que es más importante, habría dado agua durante 47 días al año a todas las personas que no tienen agua potable.
Es una de las razones por las cuales la compañía recibe duras críticas. La relación entre la Coca-Cola y el medio ambiente es todo menos positiva.
Este problema se ha trasladado hasta la India, donde muchos habitantes critican a la compañía debido a que abusan de sus recursos hídricos cuando muchas personas del país ni siquiera tienen acceso a agua potable.
Las estadísticas lo advierten: la relación entre Coca-Cola y el medio ambiente es negativa precisamente porque por cada litro de Coca-Cola será necesario gastar 2,7 litros de agua.
Esta cifra nos debería hacer reflexionar sobre el problema que supone la presencia de esta empresa en países donde el acceso al agua potable es limitado. Lo más importante es estar informado sobre este tipo de realidades, que tal vez nos hagan entender que la bebida de la felicidad tal vez reparte felicidad sólo a nivel superficial.
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